Dejé la fotografía de bodas y las prisas de la ciudad para irme a vivir al campo. Disfrutar de mis pasiones sin ajustarme a las modas del mercado y hacer fotos por gusto y no por dinero.
Vivo con mi pareja, ovejas, gallinas, perros, gatos y pavos. Con la fortuna de encontrame noches estrelladas y mañanas frescas.
Disfruto de la naturaleza, la lectura, el café, la cerveza y las caminatas.
Trato de hacer fotografías diario en donde me encuentre.
Budista y Don Nadie.
Éste es un espacio subjetivo con divagaciones en torno a la fotografía.